Relaciones Amor/Odio

 
 Muchos poetas antiguos pensaban que cuanto más se ama a una persona, más cerca se está de odiarla. Y es que en realidad, el amor puede convertirse en odio. La principal causa del fracaso del amor es el sentido pasional de la posesión, el amor suele estar rodeado de una dimensión posesiva. El verdadero amor no consiste en amar pasionalmente a otra persona y menos aún en considerarla un objeto de posesión. Nadie es de nadie, es algo que hay que tener muy claro. La posesión es entonces el principal motivo por el que se pasa rápidamente del amor al odio.

 Aunque no lo parezca, cuando mejor se está en una relación es cuando no dependes de tu pareja. Para que una relación funcione, cada uno debe bastarse a sí mismo, así la unión con la otra persona será más saludable y creativa. Hay muchas parejas que solo se forman por atracción física, por dinero o simplemente por no estar solos, generalmente estas personas solo buscan a alguien que apague su infelicidad, pero es un error, porque lo que no resuelvas por ti mismo puede que no lo haga ninguna relación. En estas parejas aparecerán pronto los celos, la posesión o la inseguridad.


  El verdadero amor consiste en llegar a comprender totalmente a tu pareja, comprender su mundo interior, reconocer sus emociones, sus problemas y experimentarlos en uno mismo. Es decir, desarrollar una empatía hacia esa persona y ponernos en su lugar, dejando el egoísmo a un lado. Es muy difícil que tu pareja te corresponda si solo piensas en ti. La pasión tampoco es un aspecto tan importante ni tan duradero en la pareja como puede ser el aspecto intelectual, el espiritual o el afectivo (complicidad).

 Para que una relación amorosa no fracase debe haber cierta armonía intelectual, es decir, compartir inquietudes. De lo contrario desaparecerá el diálogo y el silencio mutuo llevará al fracaso. La pareja también debe compartir experiencias espirituales, como la búsqueda del verdadero sentido de la vida. Solo conseguiremos afectividad y complicidad sintiéndonos comprendidos, notando que la otra persona nos entiende. Esta complicidad manifestará cariño, ternura y deseo sexual de una forma natural y alejada de todo sentimiento posesivo.

 Al lograr esta armonía en  pareja, expresaremos sin temor nuestros sentimientos, y de esta manera nos ayudaremos mutuamente en la resolución de problemas. También debemos respetar la intimidad de nuestra pareja permitiendo que viva momentos para que reflexione, medite, pasee, escuche música, quede con amigos o amigas, etc. Esos minutos con uno mismo son necesarios para el triunfo de una relación, ya que hacen que veas que nadie es perfecto, hacen que aceptes a tu pareja tal como es; juzgarla o intentar cambiarla es perder el tiempo. Aun así, si la relación llegara al punto de la separación, ten presente esta frase:


 

2 comentarios:

  1. Cómo sabían lo que yo pensaba?... es una muy buena elaboración que se hace con el tiempo, la experiencia y los valores. Hoy en día las relaciones son menos hipócritas que en otros tiempos, en tanto sean leales. Conceptos como la complicidad, el compañerismo, los gustos compartidos, incluso las necesidades individuales respetadas, son ingredientes que se valoran tanto como la pasión sexual, la pasión por compartir también es importante y también puede ser una pasión. De ahí a invadir es otra cosa.....

    Me encantó todo, gracias.

    Namasté

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